Hay dos funciones sintácticas, que me parece que son las más comunes, cuando se trata de verbos. El objeto directo, que tratamos hace algún tiempo en un artículo anterior y el objeto indirecto, en el que nos concentraremos hoy.


Además del objeto directo, que es quién o qué recibe directamente la acción del verbo, existe también el objeto indirecto, también llamado complemento indirecto.


Los verbos que construyen un complemento directo se llaman: intransitivos, porque, a diferencia de los verbos transitivos, no necesitan de un complemento para ejercer su acción. Por ejemplo:

  • correr,
  • llover,
  • crecer.

Ya sea si te refieres a él como objeto indirecto o complemento indirecto, es la función sintáctica desempeñada por los pronombres o preposiciones que designan indirectamente al receptor o destinatario de la acción del verbo.


En la oración Concedieron un premio literario a tres jóvenes escritores, el complemento indirecto a tres jóvenes escritores está exigido por la naturaleza del verbo conceder. Sabemos, que no tiene sentido conceder algo si la concesión no recae en alguien o en algo. Y en este caso, la preposición a, también nos dice que hay objeto directo.


¿Cómo saber si en la oración hay objeto indirecto?

Si el complemento del verbo, pude ser sustituido por los pronombres: le/les/se/te/me, entonces hay objeto indirecto. Ejemplo:

  • Traje unos chocolates a mi abuela. → Le traje unos chocolates.
    • El jardinero cortó las ramas a aquellos árboles. → El jardinero les corto las ramas.
  • Los niños compraron un regalo para su mamá. → Los niños se lo compraron a su mamá.